Quiero.

Quiero enamorarme de una historia escrita con millones de minutos dedicados a ella.
De una persona que me conozca al máximo y sepa todo lo que debe saber sobre mí, que no necesite mis palabras para entenderme y que con una mirada baste para saber aquello que siento.
Quiero enamorarme de una mirada profunda y de suaves caricias. De aquel que seque mis lágrimas y que su objetivo siempre sea verme sonreír.
Enamorarme de aquel que siempre busque la manera de poder hablar conmigo sin olvidar que ambos necesitamos espacio. Aquel que entienda mis momentos temperamentales y sepa que es sencillo hacer que todo mi estado anímico se vaya cuesta abajo, así como también puedo llegar a ser muy sensible y molestarme fácilmente.
Quiero enamorarme de aquel al que no tenga que fingirle sonrisas pues siempre me hará feliz. Aquel que a pesar de mis vulgaridades, mis odiosidades, mi ordinariez y mis tonterías, me quiera más que a nada. Aquel que sepa que amo que me hagan cariño en el cabello, que me den besos en la nuca y que me abracen por detrás al nivel de la cintura y que por alguna razón cuando estoy molesta, odio que me abracen. De aquel con quién la pena no exista y que más que una persona sea la mejor persona del mundo, un amigo, un hermano, un todo.
Quiero enamorarme del tiempo mientras veo sus ojos y del aire que nos roza mientras camino tomando su mano, de la luna que me recuerda que a pesar de la distancia somos uno y que lo que nos une es el cariño.
Quiero enamorarme de alguien que me haga sentir la vida más ligera, alguien con quién pueda compartir nuestras cargas, alguien que me de su mano al caer y un abrazo al levantarme. Enamorarme de quién me lleve a ver las estrellas y me cuente las historias de su vida mientras imaginamos lo que podemos hacer del tiempo mientras estemos juntos.
Quiero enamorarme de una sonrisa, de un beso, de un momento.

Enamórame.