sábado, 25 de mayo de 2013

Recopilación: Escritos a tu nombre

1

Me prohibiste enamorarme y ahora yo juego a ilusionarme.
Prometimos jugar y tomarlo como un pasatiempo casual. Conversaciones efímeras y algunos "te quiero" que rellenan espacios vacíos.
Intento jugar sin hacer trampa, sin soñarte, sin suspiros al mirar tus fotos y sin sonrisas que se escapan tras algunas de tus palabras.
Juego a engañar mis sentimientos y obligarlos a ocultar que te quiero mucho más de lo que crees. Me engaño y te engaño, haciéndote creer que puedo seguir este juego en el que debo cumplir con mantenerme distante en sentimiento.
Tengo miedo de perder y darme por vencida, por saber que lo que siento es más grande de lo que puedo callar. Tengo miedo de perderte y alejarte, porque disfruto cada segundo que este juego a durado; sintiéndote cerca, como nunca lo había hecho.

Tu juego no es mi juego, es mi delirio y mi tortura. Es lo que anhelo, tengo pero no me pertenece. Es intentar mantener el agua en mis manos aún sabiendo que correrá entre mis dedos. Es desearte con el alma y saber que nunca serás mío. 

2

¿En cuál abrazo se perdió el calor? 
¿En cuál latido se perdió el amor? 
¿En cuál suspiro se perdió la esperanza?
¿En qué momento te perdiste tú?

3

Hola, extraño.
Hoy he venido a amarte sin conocerte,
y conociéndote sé que lo encuentras una ironía;
no más que una simple tontería.
Vine a escribir cartas que no enviaré
y notas que jamás encontrarás entre las páginas de tus libros.

Extraño, hoy te extraño y es extraño que te extrañe porque nunca te he tenido.
He soñado con tu ausencia y tu presencia,
e intento comprender cómo es que ambas me dejan la misma esencia.

Extraño, ¿me recuerdas o ya me guardaste en los rincones del olvido?
Yo aún no olvido ni suspiro,
estoy inerte y sigo sin tenerte.
Pasa el tiempo y te conozco,
tanto que lo extraño ya es costumbre y el recuerdo no me aburre.

Extraño, te he soñado una vez más y comprendí que tras tus besos el pasado no se irá.

4

Me enamoré de la idea de un amor imposible, de este amor sujeto a fantasías, cómplices de mis deseos.
Es un amor apasionadamente irreal, con ínfulas de ágape. Despreocupado por ser recíproco. Soñador y creador de imposibles e imposibilidades. 
Masoquista empedernido, enamorado de ese amor-odio y de tu ausencia, del eterno vacío y del último adiós.
Es un yo siendo nosotros sin un tú.
Lleno de deseos de espiarte y verte siendo feliz a la distancia, porque este amor es así, sin posesiones, sin cadenas; dedicado a esconderse de la realidad para seguir sintiéndote mío aunque no lo seas.
Envidioso del aire que respiras, anhelando rozar tus labios tan sólo una vez más.

Desde entonces eres mi amor imposible, mi amor escondido, mi grito en el silencio, mi fantasía favorita.

5

"Si vas a sufrir por alguien, que sea por mí", dijiste una vez. Desde entonces no has dejado de doler.